jueves, 10 de julio de 2008

TRABAJÉ EL AIRE





Trabajé el aire,
se lo entregué al viento:
voló, se deshizo,
se volvió silencio.

Por el ancho mar,
por los altos cielos,
trabajé la nada,
realicé el esfuerzo,
perforé la luz,
ahondé el misterio.

Para nada , ahora,
para nada, luego:
humo son mis obras,
ceniza mis hechos.

… y mi corazón
que se queda en ellos.

Ángel González

1 comentario:

Anónimo dijo...

¡Qué bonitoooo!
Un beso