sábado, 31 de mayo de 2008

Premio Asturias Joven 2007

Ayer se presentaron los libros ganadores del Premio Asturias Joven 2007 en la Biblioteca de Asturias "Ramón Pérez de Ayala". El poemario de Natalia Menéndez La nostalgia del caníbal y los Relatos posindustriales de David Barreiro. Fue muy emocionante y muy merecidos los elogios que se hicieron a las obras de ambos autores. Enhorabuena a los dos.



En la mesa, por la izquierda, Adolfo Camilo Díaz, Mariano Arias Páramo, David Barreiro, Guillermo Martínez, Natalia Menéndez y Susana Rodríguez Sela.








(las fotos, como casi siempre, se las "robo" a Natalia)






Por la izquierda, aparecemos en la foto: Silvia Gándara, Esperanza Medina, Natalia Menéndez, Rafael Fernández y Eva Heres

jueves, 29 de mayo de 2008

érase una vez... un arte



El martes estuvimos en el Club de Prensa de La Nueva España, hablando de literatura infantil y presentando los primeros cuentos para niños publicados por Fátima Fernández.
Este es el enlace a la reseña del periódico:
http://www.lne.es/secciones/noticia.jsp?pRef=2008052900_36_641047__Aviles-Erase-arte

Estoy totalmente convencida de que el primer motivo por el que hay que acercar a los niños a la literatura es porque es un arte, lo mismo que la pintura, la música, etc. Y el cuento infantil debe merecer ese calificativo, tenemos que ser exigentes con los libros de nuestros niños.



Aurelio González Ovies, Fátima Fernández y Esperanza Medina

miércoles, 28 de mayo de 2008

Encuentros

Esta semana tampoco ha aparecido mi artículo en la edición digital de La Nueva España, sólo en la impresa. Os lo dejo a continuación.




ENCUENTROS

Que la vida está llena de encuentros no es ninguna novedad, ni un descubrimiento original al que me haya llevado una larga experiencia. Que esos encuentros perduran a veces marcándonos y definiendo lo que somos es sabido por todos. Y que en otras ocasiones los encuentros son efímeros y apenas los recordamos con el paso del tiempo es también una realidad que vivimos constantemente.

Y sin embargo hoy, precisamente por un encuentro, he vuelto a otro muy lejano en el tiempo. He vuelto a los años de colegio, y he recordado a una mujer que fue muy importante para mi entonces y de la que no he vuelto a saber nada: Adela Rico. No, no era una de mis profesoras, era la madre de dos de mis amigas, mellizas, con la que yo compartía una afición que no parecía interesar demasiado a otros adultos entonces: la poesía.

No recuerdo por qué le enseñé la primera vez uno de mis poemas, pero vuelve a mi el ánimo y el entusiasmo que me transmitía, haciéndome desear ir a su casa ilusionada cada vez que escribía algo nuevo. Ella también escribía poemas. Siento enormemente no conservar ni recordar ninguno. En aquella época yo aprendía de memoria casi todos los que pasaban por mis manos. Ya apenas recuerdo unos pocos, de otros sólo me queda la impresión que sentía al recitarlos.

De la mano de Adela hice mi primera lectura poética, con trece años, en la radio, en Gijón (lamento no recordar en qué emisora fue o cuál era el motivo, pero para los niños la vida es presente y no necesitan convertirla en historia, esa necesidad nos invade con los años, con el miedo a desaparecer para siempre sin haber dejado nada tras nosotros). También de su mano acudí a mi primer recital poético, yo, una niña, junto con otros poetas como Víctor Botas, creo que en el Teatro Jovellanos. Se me aparece como un sueño lejano aquel escenario enorme y aquel patio de butacas con personas que me escuchaban ¿qué pensarían?

Quizás pensaban lo mismo que yo ahora cuando leo los cuentos que escribe Isora. Ella tiene once años y es mi otro encuentro, el que me hace volver al pasado, a la niña que quería leer y escribir por encima de todo, porque, como a Isora, escribir me gustaba incluso más que leer ( y sus ojos me dicen, cuando se confiesa con estas palabras, que leer realmente le apasiona).
Dos encuentros que me gustaría repetir. A Adela Rico quisiera reencontrarla para volver a enseñarle lo que escribo, para poner en sus manos los poemas de aquella cría que ahora son páginas de un libro y buscan su sitio en alguna estantería.
Tal vez dejar su nombre hoy aquí me ayude a conseguirlo.

A Isora, que tiene nombre de “princesa intrépida”, y es capaz de escribir historias que nos envuelven sorprendiéndonos con un guiño de niña que viaja más allá, siempre más allá… como Peter Pan lo hacía al País de Nunca Jamás, a ella, la encontraremos todos, en unos años, formando parte de los estantes de las librerías.
Pero para ese encuentro, de momento, tendremos que esperar.

domingo, 25 de mayo de 2008

el martes a las siete

EL MARTES A LAS SIETE

Deshojabas palabras adiestradas y esquivas
mientras la eternidad se derretía.

Sólo pude añadir
¿me pagas el café?
y salir desangrada hacia la vida.


Sin ti.


EM

sábado, 24 de mayo de 2008

Sofía Castañón

De "Las afinidades electivas" tomé también prestada la foto de Sofía Castañón. Su libro ganador del I Premio de Poesía Joven "Pablo García Baena", Últimas cartas a Kansas, es uno de los tres que han llegado a mi esta semana (el jueves los tres, para ser exactos). A Sofía "casi" la conocía, aunque no personalmente sí algunos de sus poemas y su nombre. He disfrutado con el encuentro.




Aquí alguno de sus poemas... no dejéis de leer el resto

L'ASTRONOME QUI REGARDE EN BAS

Lavas las manos
en lo profundo del cosmos
mientras me miras
con sonrisa dulce
y dices que me entiendes.


II

Esta noche
al verte
sólo se me ocurren
todos
los tópicos del mundo.

Y suenan tan bien.


Sofía Castañón

Beatriz Ros

También conocí a Beatriz Ros. Con su libro De cómo descubrí que seguía viva ganó el I Premio de Poesía Joven "Pablo García Baena", junto con Sofía Castañón.

Ella define así su poética:
Escribo sobre mi
porque no sé nada de los demás
pero sí sé que yo
podría ser cualquiera

Y a mi me gusta esa definición.


(la foto la tomé prestada de "Las afinidades electivas")


LO MÁS TERRIBLE DE TODO FUE EMPEZAR
tomándonos un té.

(Con lo que me gusta)

No sé qué marca, pero siempre ardía.
Tuve que esperar mucho hasta poder beberlo.
Tiempo para que me dijeses cosas
que sólo se pueden tragar
con ayuda de agua hirviendo.

Ese invierno bebí té todas las tardes
te vi todas las tardes.

Hacia el verano, y eso es lo terrible,
me vi comprando tila en las tiendas que no
cierran.

Beatriz Ros

Víctor García Méndez

Esta semana conocí a Víctor García Méndez, estuve en la presentación de su primer libro: Epitafio de primavera. Os dejo uno de sus poemas para que os entren las ganas de leer el resto.




En la foto Sofía Castañón, Víctor García Méndez y Héctor G. Navarro



Donde la tarde se desliza
lenta
sobre la acuosa latitud del mundo
y concentra en tus ojos
el gastado lenguaje de los hombres:
allí dejadme.

Y sobre el mármol frío de mi nombre
reverdezca por mayo

toda la esperanza.


Víctor García Méndez.

II aniversario de Hesperya

El jueves estuve invitada por Hesperya, como miembro de Creactiva, a un coloquio sobre asociaciones culturales dentro de las actividades programadas para el segundo aniversario de la revista. Lo cierto es que disfruté mucho y me encantó conocerlos personalmente a todos.





En la foto Beatriz Ros, Sofía Castañón, Elena Medel, Esperanza Medina y Natalia Menéndez.

sábado, 17 de mayo de 2008

Fernando Botero

Bañistas, de fernando Botero.




y uno de mis poemas de Escrito con la a...

Te quiero aquí,
llevando tu armadura
de miradas de almíbar
y sonrisas de fresa.

Te quiero aquí,
luchando con las olas,
dejando tus moléculas de espuma
prendidas en la arena.

Te quiero aquí,
tumbado en mi toalla,
prosaica y cotidiana,
real,
como la voz del mar,
como el abrazo transparente del calor,
como la sed callada de mi piel.

Real.
Aquí y real...

Te quiero aquí.


EM

DE FÁBULA

Esta semana no ha salido mi artículo en la edicción digital deL diario La Nueva España, sólo en la impresa. Lo transcribiré a continuación.



¿ES TODO LO “INFANTIL” PARA LOS NIÑOS?

Una vez tuvimos un pato, se llamaba Saturnino, como el de la tele. A pesar de nuestros cuidados Saturnino consiguió crecer, pero no fue capaz de aprender a volar aún cuando dedicábamos tardes enteras de nuestro descanso infantil a instruirlo pacientemente lanzándolo desde la cuarta escalera del patio. Tampoco le hizo nunca gracia vestirse y al cabo de unos meses el muy ingrato huía cada vez que mi hermano, Fernando (que era el dueño real del pato) o yo nos acercábamos. No recuerdo muy bien dónde llevaron después a Saturnino, puede que a la granja de alguien, en Villapedre, pero de eso ya no estoy segura. En cualquier caso el pobre Saturnino descansaría lejos de nuestras atenciones lo que le quedase de vida hasta que, supongo, alguien lo guisase.

¿Qué por qué cuento esto? Porque nosotros lo que en realidad queríamos era un pato como el de la tele, que parecía que hablaba y vivía aventuras cada día, no éramos conscientes de estar maltratándolo. En realidad, aunque niños (pero no tontos), sabíamos que los animales no podían hablar de ninguna manera, por más que los entrenásemos. Pero aquellas aventuras ingenuas ocurridas en la granja nos entraban por los ojos directas al cerebro tan claras como las margaritas que nos servían en primavera para hacer collares.

Y no ha cambiado nada, la mente de los niños sigue igual de receptiva antes las imágenes que transmite la televisión. O sí, si han cambiado cosas, a peor, a muchísimo peor, porque ahora muchos de los “programas infantiles” no muestran al educado pato Saturnino, sino que hacen desfilar ante los niños personajes agresivos, groseros, soeces, personajes que hacen trampas en el colegio, que se ríen de los demás… Hemos llegado a pensar que “como son dibujos son para niños”, y no es así, en absoluto.

¿Cuántos de los adultos que tienen niños en casa menores de ocho años se paran con ellos a ver los dibujos animados que ellos ven? Sólo por poner un ejemplo mencionaré a Shin Chan (un niño grosero y tirano con sus padres), no es precisamente el hijo perfecto que todos quisiéramos tener, aunque podría parecerlo, dado la cantidad de niños que no sólo lo ven sino que tienen ropa, muñecos y demás elementos propagandísticos de este personaje.

Eso no quiere decir que todas las series infantiles sean perjudiciales para ellos, al contrario, se diseñan con autentico mimo algunos de estos programas, sobre todo los dedicados a los más pequeños (por compensar con otro ejemplo: “Caillou”). El verdadero problema es que no hay un mínimo control de calidad en lo que las televisiones ofrecen a los niños. Es cierto que ocurre también con los adultos, pero nosotros no estamos desprotegidos ante eso, podemos cambiar de canal o apagar el televisor directamente. La solución para los niños es sencilla también: interesémonos un poco por el contenido de lo que ven y escojamos para ellos sólo aquello que nos parezca apropiado. Los niños se divertirán igual y quizás incluso aprendan con el tiempo a escoger por ellos mismos.

En fin, dejemos de hablar de la televisión basura y, simplemente, cambiemos de canal.

miércoles, 14 de mayo de 2008

Antígone

Hoy finaliza en Valdecarzana la exposición Antígone. La Nueva España ha publicado el siguiente artículo escrito junto con Natalia Menéndez.

http://www.lne.es/secciones/noticia.jsp?pRef=2008051400_36_635891__Aviles-Fotografia-palabra




La fotografía es de Ricardo Solís para la Nueva España.

Fotografía y palabra

NATALIA MENÉNDEZ Y ESPERANZA MEDINA.La lírica y la imagen armonizan a la perfección en la exposición que hoy se clausura en el palacio de Valdecarzana. Se trata de una muestra fotográfica donde la imagen se conjuga con la poesía y donde la fuerza femenina es la protagonista. Antígona representa el mito clásico de la tragedia de Sófocles: la mujer que desobedece la ley, la que se rebela, la que sufre y la que, además, escoge su propia muerte.

Las fotografías de Nuria Pozas son, precisamente, eso, retratos de mujeres, con una intensidad expresiva que nos llega a través de rostros en blanco y negro, sin apenas adjetivos, ornamentos o vestidos inútiles. Rostros acompañados de velos, adornos tan masculinos como la corbata, cables, interruptores de la luz, con un movimiento de manos o simple maquillaje (trazos gruesos que definen la fuerza de la intención de las mujeres), miradas retadoras, imposibles de esquivar, conseguidas por la fotógrafa con modelos no profesionales. Son series de fotos de las que se desprende a veces la ironía.

Con este minimalismo y sobriedad pretendida, Nuria Pozas alude a quince conceptos vistos también a través de nuestra palabra, la de ocho escritores avilesinos del grupo literario Creactiva. Las treinta y ocho imágenes que componen la muestra fotográfica se enlazan y dialogan con el espectador, igual que lo hacen los dieciséis poemas que las acompañan. Juntos buscan una nueva dimensión de cada concepto: libertad, esclavitud, vergüenza, impotencia o insolencia son algunos de ellos. Con la expresión, el gesto en ocasiones desafiante y los objetos cotidianos que adorna la figura y que representan sus ataduras, cada rostro de mujer, cada gesto cuenta una historia y cada texto que lo ilustra acentúa su carga poética, expresando un sentimiento universal.

Durante mucho tiempo se han contrapuesto la imagen y la palabra. Muchos han intentado demostrar qué tiene más valor, pero ¿qué define a la imagen si no es la palabra y qué evoca la palabra si no son las imágenes? Inseparables, complementándose y empujándose para transmitir el concepto, así se muestran juntas en este proyecto expositivo en el que hemos participado, junto a Nuria Pozas, Fátima Fernández, Verónica Canel, Ana Ruiz, Aurelio G. Ovies, Rebeca Fernández o María José Rosete. Nuestra experiencia nos ha demostrado que existen nuevos espacios para el arte y la literatura, y un diálogo no sólo posible, sino necesario, entre ambas disciplinas.

domingo, 11 de mayo de 2008

Presentación de la antología de Marian Suárez

Ayer, en la Casa de Cultura de Avilés la poeta Marian Suárez presentó su antología poética Puente colgante sobre el abismo de las sensaciones. Lo hizo en un recital compartido con otras veintidós personas, vinculadas de una u otra manera al mundo de la cultura y a la propia escritora.
La música, al piano, fue de Ana Fernández Pico.



En la foto superior aparecen algunos de los lectores de los poemas de Marian Suárez en la velada de ayer. De pie, por la izquierda: Francisco Álvarez Velasco, Ángeles Sanchez, José Manuel Feito, Alberto del Río, Pilar Varela, Marian Suárez, Monserrat Menéndez, Nelly Fernández, Ramón Rodriguez, Esperanza Medina y Aurelio González Ovies. Agachados, por la izquierda: Ana Fernandez Pico, Laura Cueto, Luis Rodríguez, Román Antonio Álvarez, Marta Elena, Jorge Iván Argiz, Olga Mesa, Elisa Torreira y José Ferrero.

Una vez terminado el acto siguieron las fotos y la firma de libros.



Esperanza Medina, Marian Suárez, Natalia Menéndez y Mª José Rosete.

sábado, 3 de mayo de 2008

Inauguración de "Antígone"



Ayer se inauguró la exposición fotográfica Antígone, de Nuria Pozas, con textos de miembros del grupo literario Creactiva.
Nuria se encontraba mal y no pudo asistir a la inauguración, así que en la foto aparecemos sólo algunas de las responsables de los textos: Natalia Menéndez, Esperanza Medina, Verónica Canel, Mª José Rosete y Rebeca Fernández.
En la foto superior se puede ver parte de la exposición.