miércoles, 30 de enero de 2008

Y tú.
Y yo,
que no tengo ya nada que decir,
que no encuentro el modo o la manera
de soñar esta vida hasta el final.
Y tú,
que no estás.
Y yo,
que si estoy no me conozco,
que me asusto si despierto
y descubro que la vida
ni me mira,
ni recuerda mi nombre,
ni se queda dormida en mis cajones,
bajo aquel pañuelo verde,
que, por cierto,
hace tiempo que no logro encontrar.

(de Escrito con la a...)

No hay comentarios: